(Fuente La Nación) Lo reconoció la ministra de Salud, Carla Vizzotti; argumentó que se enfrenta una nueva etapa en la lucha contra el coronavirus
La ministra de Salud, Carla Vizzotti, afirmó este lunes que está bajo evaluación la posibilidad de eliminar la exigencia de aislamiento para los contactos estrechos de casos positivos de coronavirus que tengan el esquema completo de vacunación. La declaración tiene lugar en medio del incremento exponencial de casos en los últimos días.
“Estamos analizando permanentemente si es necesario, y si es posible, seguir disminuyendo el aislamiento en el personal estratégico, siempre mirando la seguridad y evidencia que genera esta medida”, consideró, en primera instancia, la funcionaria nacional en una entrevista.
Vizzotti aclaró, en diálogo con el canal TN, que la medida de retirar el aislamiento no responde a un pedido del empresariado. “Es algo que se está analizando. Pero quiero remarcar que no es porque lo haya pedido un sector económico, sino que esa es la mirada y es a lo que se tiende actualmente. En España hasta están considerando tomarlo como una gripe común”, aclaró.
La funcionaria expresó que la preocupación se concentra ahora en el ausentismo en los puestos de trabajo y no ya tanto en la ocupación de camas de terapia. Por eso, se analizan distintas estrategias. Y, una de ellas es discontinuar el requisito de aislamiento obligatorio para quienes tengan vacunación completa, pero del personal de salud, al menos en una primera fase.
“Lo planteamos para el equipo de salud, principalmente, y de hecho ya se está haciendo, como en Córdoba, están trabajando con monitoreo permanente. Primero desde el punto de vista sanitario, segundo, para asegurar los servicios esenciales y, por supuesto, teniendo la mirada de sostener la actividad económica y productiva”, agregó.
Vizzotti confirmó que habrá reuniones de epidemiólogos con los integrantes del Consejo Federal de Salud para analizar la posibilidad de eliminar el aislamiento en los casos de contactos estrechos. Con menor ocupación de los espacios de las unidades de terapia intensiva, las alertas en la Casa Rosada están puestas en torno a los efectos sobre la actividad económica.
“Es un momento bisagra porque estamos definiendo si entramos a una endemia. Y hay que pensar si cambiamos toda la estrategia. Ahora la idea es tratar de retomar y sostener las actividades sin riesgo sanitario, más allá de lo que significa tener un virus nuevo”, analizó.
La medida ya había sido adelantada por Vizzotti este domingo, cuando comentó el caso de Uruguay. Allí, “a los que están vacunados con tres dosis no se los aísla ni testea; y a los que tienen dos dosis, se les hace un test de antígenos y, si les da negativo, no se los aísla”.
“Es una posibilidad, esta semana lo vamos a ir discutiendo, se está evaluando semana a semana”, dijo la funcionaria. Insistió que, en caso de implementarse, se habría primero con el personal estratégico.