spot_img
spot_img
20.5 C
Nueve de Julio
domingo, noviembre 24, 2024

Lotes agrícolas: relevamiento del contenido de agua, realizado por INTA

 

Relevamiento del contenido de agua en lotes agrícolas de los Partidos de Bragado, Bolívar, 9 de julio y 25 de Mayo. (Buenos Aires) al inicio de la campaña de trigo 2023.
Autores, por orden alfabético. Ing. Agr. David Melión 2; Ing. Agr. Gonzalo Perez 3; Ing. Agr. MSc. Sergio Rillo 1y Lic. Lisandro Torrens Baudrix 1

1. Agencia INTA 9 de Julio; 2. Agencia INTA Bragado; 3. Agencia INTA 9 de Julio

Comprender los procesos que intervienen en la relación suelo-planta y atmósfera permite desarrollar estrategias de manejo de cultivos tendientes a optimizar los rendimientos de cada zona. En la mayor parte del área productiva argentina las precipitaciones ocurridas durante el ciclo de los cultivos no alcanzan a cubrir los requerimientos de uso de los mismos (UC). En consecuencia, es necesario conocer la capacidad de retención de agua (CRA) y el contenido de agua útil (AU) a la siembra, dado que tendrá una significante asociación con el rendimiento del cultivo e influencia en la toma de decisiones, resultando determinante para desarrollar las bases del manejo del cultivo y la relación con la nutrición (interacción genotipo-ambiente).
La disponibilidad de agua resulta dependiente de los aspectos genéticos y del espesor del suelo (arcilla, arena y limo). Esta relación determinará la capacidad de retención de agua y la exploración efectiva de la raíces. Además del régimen hídrico, el agua almacenada en el suelo, también está influenciada por la cercanía de una capa freática permanente u oscilante (aportando por flujo capilar agua y nutrientes). Asimismo, los factores de manejo condicionaran la captación (infiltración y conductividad del agua en el suelo), conservación y la eficiencia de uso del agua (generación de biomasa y granos). (Quiroga, et al., 2012).
Las eficiencias en el uso del agua (EUA), kg grano mm-1 de agua consumido son muy variables. Los valores más frecuentes para ambientes de secano varían entre 5,6-11,5 kg mm-1. Álvarez et al. (2008) determinaron para la región de la pampa arenosa EUA promedios de 8,3 kg mm-1, para uso consuntivos de alrededor de 430 mm.
Los suelos predominantes en la región (zona agroecológica Pampa Arenosa) son poli-genéticos, en un mismo perfil se encuentran dos o más suelos superpuestos. En las zonas elevadas predominan los Hapludoles (típicos – énticos); suelos profundos, de textura arenosa franca y relieve suavemente ondulado cuya principal limitante es la baja retención hídrica y la susceptibilidad a la erosión eólica, habiendo evolucionado sobre sedimentos arenosos con pendientes del 1%. En las zonas bajas se desarrollan los Hapludoles Thapto árgicos y nátricos, formados por acumulación de material arenoso sobre un horizonte textural más antiguo de textura franco arcillo arenosa, con riesgo de encharcamiento y anegamiento permanente. En relieves de lomas y media lomas planas y bajos no inundables del norte de la región se encuentran los Argiudoles, y Hapludoles típicos, siendo el primero, un suelo oscuro, profundo, bien provisto de materia orgánica y bien drenado, no alcalino, no salino, formados sobre sedimentos loéssicos franco limosos y con mayor contenido de arcilla y limo que los Hapludoles.
El objetivo de este trabajo fue conocer los contenidos de agua (mm) inicial para la siembra de trigo. Los lotes fueron relevados entre mediados del mes de abril y fin de mayo. Se analizaron lotes ubicados mayoritariamente en áreas de influencia de las agencias de INTA de Bragado, Bolívar y 9 de Julio, los perfiles correspondieron a la clasificación Hapludoles (Típico y Éntico), Argiudoles y Argialbol. En la Figura 1 se ubican la mayoría de los sitios relevados.

Figura 1. Ubicación de lotes relevados.

Los contenidos de agua de los suelos se evaluaron por el método gravimétrico (HG), en intervalos de profundidad de 20 cm y hasta los 180 cm de del perfil. El peso HG se lo multiplicó por la densidad aparente (DA) para obtener el valor de humedad volumétrica (HV), el cual se multiplicó por la profundidad de suelo explorado para obtener el contenido de agua total (mm), luego se realizó la resta del punto de marchitez permanente (PMP), para determinar el contenido agua disponible (mm). Se empleó la siguiente ecuación:
Lámina de agua (mm): [Agua total – PMP x DA x espesor de capa de suelo
El agua que esta retenida en PMP, no se encuentra disponible para los cultivos – está fijada a tensiones elevadas y las raíces no la pueden absorber -, es agua no disponible para las plantas.
Se debe considerar que el cultivo de trigo podría desarrollar un sistema radicular de hasta 2 metros (130 – 200 cm, según ciclo), si no tuviese limitantes en el perfil. De todos modos, la expansión radicular en sentido vertical, a mayor profundad es a partir de la fase de encañado y la máxima longitud se alcanza cercana a la floración. Sin embargo, el 50% de las raíces se encuentran en los primeros 25-30 cm. Asimismo, a los 50 días desde la emergencia, el sistema radicular podría realizar una exploración vertical y horizontal hasta los 50-60 cm y a los 100 días hasta los 120 a 150 cm. Comprender esta dinámica de desarrollo radicular y conocer el contenido del agua del perfil, permitirá a gestionar la siembra del cultivo.
En la tabla 1 se presentan los contenidos de agua (mm) para los espesores de suelo 0-100 cm y 100-180 cm de profundidad y numero de ubicación en mapa (Figura 1). Se aprecia que los perfiles, en general y mayoritariamente, tienen muy bajos contenidos de agua (mm), un 27,77 % con contenidos de 0-100 mm; 44,44% (100 a 150 mm) y 22,22% de 200 a 250 mm de agua, con mínimos de 53 mm y máximos de 250 mm y también hay algunos con niveles negativos. Además, solamente el 5%, se encuentran con contenidos de agua inicial por encima del PMP en los estratos superficiales y sub-superficiales del perfil (0-60 cm). Estas determinaciones está indicando la intensidad de la seca de primavera-verano y la falta de recarga de los perfiles, por ausencia de precipitaciones otoñales del año en curso, es decir aún persiste un ambiente de seca.

Tabla 1. Contenido de agua (mm) a 0-100 cm y 100-180 cm y total del perfil, coordenadas, y cultivo antecesor. (Zona Bragado los contenidos son 0-100 cm).

Esta singularidad, de ambientes con los perfiles secos a la siembra del cultivo de trigo, en el centro-oeste de la Pampa Arenosa, resulta novedoso para la agricultura contemporánea, del mismo modo, lo fue la sequía en los cultivos de verano de la campaña 2022/23.
En las figuras 1, 2, 3, 4, 5 y 6 se puede observar los contenidos de agua (mm) y la relación con el PMP (mm), cada 20 cm de espesor de suelo hasta los 180 cm de profundidad para las zonas de Bolívar y 9 de Julio y hasta los 100 cm para la zona de Bragado.

 

Claramente se observan muy pocos perfiles con contenido de agua disponible en el espesor 0-100 cm. Los perfiles que presentaron razonables contenidos de agua se deben a la recarga por las lluvias otoñales (fueron heterogéneas en cantidad y distribución geográfica). Además, los perfiles que presentaron buenos contenidos de agua (mm) en profundidad son por la presencia de una freática con flujo ascendente activo.
Es así que para la zona de Bragado (Figura 1), se aprecia todo el perfil extremadamente seco y distanciado del PMP. En la figura 2, el perfil tiene muy buen contenido de agua en el espesor 0-20 cm, sin embargo, en los espesores inferiores repite como en la figura 1, un déficit hídrico severo. En el primer caso no hay condiciones para la siembra del trigo y en el segundo caso hay condiciones, no obstante, será dependiente de futuras precipitaciones para un buen desarrollo.
En las figuras 3 y 4 se presentan los perfiles a la zona de Bolívar. En la figura 3, se reconoce un perfil con contenidos de agua cercano al PMP que a partir del espesor 160 cm recobra el gradiente hídrico por ascenso capilar. En contraste, el perfil de la figura 4, denota un déficit hídrico muy severo. En los dos ejemplos no hay condiciones de siembra del cultivo.
En la figura 5, (zona 9 de julio sur), el perfil se distingue por presentar buenos contenidos de agua en superficie, 0-60 cm, con déficit hídrico severo hasta los 140 cm y luego un marcado flujo ascendente por capilaridad. Esta modalidad de humedad se le conoce comúnmente como “humedad en sándwich”. En contraste, en la figura 6 (zona 9 de Julio norte) se aprecia un gradiente hídrico más parejo en todo el desarrollo del perfil, con mayores contenidos en el espesor 0-60 cm y nuevamente el aporte de un flujo ascendente. Este perfil tiene condiciones moderadas para la siembra y desarrollo del cultivo, en el perfil de zona sur hay condiciones de siembra, pero se necesitaran de precipitaciones para unificar los contenidos hídricos superficiales y profundos.
De acuerdo a estas determinaciones se presenta muy aleatoria la siembra del cultivo de trigo, se hace muy dependiente de futuras precipitaciones durante el ciclo del cultivo, dado que si el suelo se encuentra con bajos niveles de humedad dificultará severamente al desarrollo. Concretamente, las raíces no dispondrán de agua para su desarrollo y viajar a horizontes más profundos del perfil, en consecuencia generar la biomasa crítica para óptimos rendimientos. Consideremos que a una EUA de 10 kg grano mm-1 de agua consumida, el cultivo estaría necesitando 400 mm para alcanzar 4000 kg ha-1 (entre agua reservada en el perfil y precipitaciones).
En síntesis, en este trabajo se ha presentado el contenido de agua (mm) inicial para la campaña de trigo 2023, evidenciándose, para los lotes y zonas evaluadas, un déficit significativo. Si bien, acaecieron lluvias luego del relevamiento, las mismas no tuvieron el potencial de modificar la estructura de este análisis. En consecuencia, el cultivo de trigo será muy dependiente durante el desarrollo del ciclo de las precipitaciones (oportunidad y cantidad), para lograr rendimientos óptimos.

BIBLIOGRAFÍA
ANDRIANI, J. 2000. Crecimiento raíces de principales cultivos extensivos en suelos Hapludoles de la provincia de Santa Fe. EAA INTA Oliveros. Para Mejorar Producción Nº 13, 40-44.
Álvarez, C, M. Barraco, C. Scianca, M. Zaniboni, C. Spagnuolo. 2008. Fertilización nitrogenada y eficiencia de uso de agua en trigo en la región subhúmeda y semiárida pampeana. VII Congreso Nacional de trigo, V Simposio Nacional de Cereales de siembra otoño-invernal, I Encuentro del MERCOSUR. 2 al 4 de julio de 2008, Santa Rosa, La Pampa.
http:/www.inta.gov.ar/suelos/cartas/index.htm (Base de datos de suelos en la Provincia de Buenos Aires, INTA Instituto de suelos, Castelar, BA.
Imbellone P., Giménez, JE., Panigatti, JL. (2010). Suelos de la Región Pampeana. Procesos de Formación. Ed. INTA. Buenos Aires. 320 pp.
Quiroga A., Fernández, R., Azcarate, P., Bono, A. y Gaggioli, C. (2012). Agua del suelo. Bases funcionales para su manejo. En Manual de Fertilidad y Evaluación de Suelos. Eds. Quiroga, A. y Bono, A. pp. 161. Buenos Aires: INTA.
Stafer, G.A., Miralles, D.J., Savin, R., Whitechurch, E.M. y Gonzalez, F.G. (2003). Ciclo ontogénico, dinámica del desarrollo y generación del rendimiento y la calidad en trigo. En: Satorre, R.L. Benech, G.A. Slafer, E.B. de la Fuente, D.J. Miralles, M.E. Otegui y R. Savin. Producción de granos. Bases funcionales para su manejo. Facultad de Agronomía. U.B.A. Argentina.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Más noticias