En el marco del Día Mundial de la Salud Mental que se conmemora el 10 de octubre, estudiantes y docentes de la Tecnicatura Superior en Acompañamiento Terapéutico del Instituto Superior de Formación Docente y Técnico N°4 de la ciudad de 9 de Julio llevaron a cabo una interesante actividad. Con la clara intención de visibilizar el tema, llevaron a cabo la intervención «Luces y Podcats» el miércoles 11 de octubre a las 19 horas en Plaza Italia, a través de la materia Prácticas Profesionalizantes por parte de alumnos de primero, segundo y tercer año junto a los profesores; Claudia Gonzalez, Jorge Viublioment y Paula Montalbano.
Alumnos de la carrera Acompañamiento Terapéutico reflexionaron acerca de que «muchas veces hay desconocimiento de la importancia que tiene la salud mental para cada uno de nosotros, ante esa desinformación tendemos a descuidarla y descuidarnos. Tener un buen estado de salud mental nos permite llevar una mejor calidad de vida, conduce a una imagen positiva de uno mismo y satisfactorias relaciones con amigos y familiares».
El docente Jorge Viublioment comentó que «tal como lo dice la salud mental, estamos convencidos de que la salud tiene que ser un derecho y la salud mental también es un derecho. Como agentes de salud nos tenemos que comprometer en hacer valer ese derecho de todos los ciudadanos».
«La actividad consistió en una puesta de sonidos y luces para empezar a hablar de la salud mental. Los alumnos hicieron podcast y folletos, con información para la gente hacerca de algunos aspectos de salud mental y donde pedir ayuda. Los alumnos de acompañamiento terapéutico trabajan esencialmente con problemas de salud, acompañando junto con equipos interdisciplinarios. No tenemos que tener miedo al hablar de salud mental», agregó el docente.
«Hay que reconocer los problemas y a cada edad y a cada género le va a corresponder una solución. A cada sujeto con su problema le corresponde un tratamiento. Eso es lo que se busca. Si bien lo farmacológico y lo médico es una forma importante, también son necesarios otros aspectos como el arte, la música, el acompañamiento terapéutico, para el bienestar», sostuvo Viublioment.
«Creemos que la familia, la sociedad tienen que dar cuenta de esto. Nadie está solo, nadie enloquece solo y nadie sana solo. Si tenemos alguien para pedir ayuda hay distintas instancias para hacerlo, en el Hospital, en los CAPS y plantearlo a los especialistas. Siempre habrá alguien para acercar. Hay que ayudar lo antes posible, para que la persona reciba el tratamiento.
No es fácil el tema, pero se empiezan a abrir puertas para empezar a hablar de depresión, adicciones y suicidio en la búsqueda de soluciones a su debido tiempo», concluyó.