«Hemos implementado una serie de medidas a favor de las pymes con el objetivo de promover la inversión y generar empleo a través de una reducción en la presión fiscal, simplificación administrativa, reducción del stress financiero y más crédito», señaló el ministro de Producción, Francisco Cabrera, durante una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno.
El funcionario afirmó que la minimización de los saldos a favor de IVA y Ganancias «permitirán bajar el nivel de retenciones, favoreciendo de esta manera a unas 280.000 pymes».
Por otro lado, la ampliación del plazo de pago de Iva, que pasará de 30 a 90 días, tendrá incidencia directa en unas 850.000 pymes, que deberán presentar las declaraciones juradas mensualmente y recién a los tres meses liquidarán este tributo.
En cuanto a los créditos productivos, Cabrera indicó que se «destinarán 137.000 millones de pesos a través de la banca comercial, lo que representa un aumento de 26.000 millones de pesos y permite que cada pyme tenga acceso a un crédito de 450.000 pesos, aproximadamente».
En esta dirección, también se le asigna un rol preponderante al Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), que lanzará una nueva línea de créditos por un total de 6.850 millones de pesos.
El efecto de la baja en las retenciones se aplicará elevando los montos mínimos en los principales regímenes, que en el caso de Ganancias será del 400 por ciento, mientras que en Iva alcanzará el 135 por ciento.
«Eliminamos retenciones y automatizamos mecanismos para disminuir la carga impositiva y simplificar la cantidad de trámites de las pymes, para que puedan concentrar sus esfuerzos en producir más y crecer», explicó Cabrera.
El 68 por ciento de las pymes recibirá un certificado de no retención de Iva de manera automática y para el resto los requisitos serán más flexibles, lo que redundará en menos retenciones de impuestos y menor carga administrativa.
El otro capítulo de los incentivos para pymes se propondrá a través de un proyecto de ley que incluye eliminación de impuestos, incentivos fiscales para el fomento a las inversiones y más y mejores oportunidades de financiamiento.
De hecho, el proyecto prevé que se deduzca de Ganancias el 8 por ciento del monto correspondiente a las inversiones que se concreten entre el 1 de julio y el 31 de diciembre de 2018, con topes de un 2 por ciento de las ventas.
Además se contempla la devolución del Iva para inversiones con la entrega de un bono de crédito fiscal y la eliminación del impuesto a la Ganancia Mínima Presunta, como así también una mayor compensación del impuesto a los créditos y débitos bancarios a cuenta de Ganancias.
Respecto a mejoras en el financiamiento, el proyecto tiene un capítulo exclusivamente dedicado a Obligaciones Negociables, Sociedades de Garantía Recíproca y bonificación de tasa, entre otras medidas.
La clasificación actual de pymes se encuentra encuadrada por sectores y categorías, de acuerdo al volumen de facturación anual.
Los topes en millones de pesos para las micro son los siguientes: 2 (agropecuario), 7,5 (industria y minería), 9 (comercio), 2,5 (servicios) y 3,5 (construcción). Las pequeñas presentan este diseño: 13 (agropecuario), 45,5 (industria y minería), 55 (comercio), 15 (servicios) y 22,5 (construcción).
Luego ingresan las medianas en su primer tramo: 100 (agropecuario), 360 (industria y minería), 450 (comercio), 125 (servicios) y 180 (construcción). Finalmente, los montos máximos para el segundo tramo de las medianas son: 160 (agropecuario), 540 (industria y minería), 650 (comercio), 180 (servicios) y 270 (construcción).
Participaron de la conferencia de prensa, además de Cabrera, el Jefe de Gabinete, Marcos Peña; el ministro de Trabajo, Jorge Triaca; y el Administrador Federal de Ingresos Públicos, Alberto Abad.