NOTA DE OPINION
SORPRESA
La sorpresa política de esta semana fue el ofrecimiento de Macri a Piccheto para que se sume a la fórmula oficialista como candidato a vicepresidente. Su aceptación fue inmediata y las repercusiones políticas y de los mercados fueron muy positivas. Bajaron el dólar, las tasas y el riesgo país y subieron las acciones y los bonos en la Bolsa; en una palabra los mercados ya votaron, prefieren la fórmula Mauricio Macri – Miguel Angel Piccheto que la de Alberto Fernández – Cristina Fernández de Kirchner.
Todas las cartas están sobre la mesa, además de las dos fórmulas anteriormente citadas van a competir, aparentemente con escasas posibilidades, Roberto Lavagna – Juan Manuel Urtubey, con el propósito de quebrar la polarización. Por la izquierda se presentarán Nicolás del Caño, por un lado y Manuela Castañeda por el otro; y por la derecha, el Frente Despertar de José Luis Espert y Frente Nos de Juan J. Gómez Centurión.
En la Provincia de Buenos Aires María Eugenia Vidal lleva al mismo candidato a vice gobernardor que en el primer mandato, el radical Daniel Salvador. Por el kirchnerismo la fórmula es Axel Kicilof – Verónica Magario y aparentemente por el frente de Lavagna que se llama Concenso Federal 2030 su candidata sería Graciela Caamaño o Margarita Stolbitzer.
El kirchnerismo acusa a Macri de mentiroso y de mala praxis. Alberto Fernández declaró que no quiere debatir con Macri por estos motivos, sus principales acusaciones se refieren a la promesa de bajar la pobreza y la inflación, cuestiones que Macri no pudo resolver y que para algunos empeoraron. Sin embargo, si hablamos de mentiras y mala praxis tampoco los kirchneristas son los más indicados para tirar la primera piedra. Recordemos los indices de inflacion totalmente dibujados de Guillermo Moreno.
En estos días se conocieron que los tribunales internacionales del CIADI fallaron contra la Argentina por la estatización de Aerolineas Argentinas, no es el primer fallo que nos castiga a pagar millones de dólares. También se conocieron otros como el de YPF y Aguas Argentinas y en poco tiempo más se conocerá el de algunas AFJP que también se vieron perjudicadas por las estatizaciones caprichosas y mal hechas por los kirchneristas. Para algunos observadores todas estas demandas nos pueden costar a los argentinos alrededor de 30.000 millones de dólares. O sea que de mala praxis los kirchneristas mejor que no hablen durante toda la campaña.
Venezuela y su régimen que lleva 20 años en el poder y a quien admiran mucho Cristina y sus seguidores tiene 43 causas en el CIADI y les va a traer penosas consecuencias a los venezolanos porque agravarán sus dificultades económicas y financieras.
En octubre próximo todos los ciudadanos argentinos deberemos elegir si queremos ser un país capitalista moderno, integrado y abierto al mundo o si queremos ser socialistas y juntarnos con los chicos malos, Venezuela, Cuba e Irán; encerrarnos en un cascarón y vivir con lo nuestro. Elegir entre la libertad y el libre mercado y fomentar las exportaciones, una verdadera república democrática o el regreso al autoritarismo populista. Los kirchneristas no quieren la división de poderes; ya lo han anunciado varios de ese espacio, entre otros Zaffaroni y Alberto Fernández y quieren revisar los fallos de los juicios contra la corrupción y elegir jueces comprometidos con la mayoría gobernante que suponen van a ser ellos. Cristina cuenta con trece procesamientos y dos pedidos de desafuero, me parece que en otros países no podría ser candidata ni a intendente.
Muchos tienen la sospecha y algunos la certeza de que si llegan a ganar las elecciones Alberto Fernández será un empleado de CFK y que cumplirá sus órdenes al pie de la letra. Pichetto lo dejó bien claro desde el primer momento cuando dijo: “a mí me eligió el presidente y no al revés” dando a entender que los votos y el poder son de Cristina y no de Alberto. Hay que saber leer lo que se dice y lo que se insinúa.
Eduardo Gallo Llorente
14 de Junio de 2019
