El sábado a las 21.31 hs se puso en marcha la 33º Peregrinación desde la Iglesia Catedral de 9 de Julio para arribar al Monasterio Benedictino en horas de la mañana del domingo, compartiendo la misa a cargo del Obispo Martín de Elizalde.
La mayoría de los peregrinos llegó sobre la hora de la muy agradable noche nuevejuliense, dispuesta a compertir un momento de fe y esperanza, sobre todo con el aporte de los jóvenes que se suman año tras año.
En esta ocasión el lema fue «Madre, ayúdanos a cuidar la vida». Quienes no pudieron completar el recorrido acompañaron hasta la rotonda de Ruta 65 y Acceso Mitre. Al final un buen número de fieles participó del tradicional evento religioso.