Convulsionada por las derivaciones político-judiciales de los incidentes ocurridos el lunes durante la asunción de Daniel Scioli y Gabriel Mariotto, la Legislatura bonaerense podría demorar la aprobación de ciertas leyes enviadas por el Ejecutivo, que iban a ser tratadas en sesiones extraordinarias, como la Ley Marco de Regionalzación.
Hasta ayer, las fuentes consultadas por DIB pusieron en dudas el tratamiento de temas de alto vuelo político en extraordinarias como consecuencia directa de los incidentes del viernes y de las derivaciones que tuvieron en los días siguientes.
La cámara de Diputados que está convocada para sesionar el miércoles o jueves, pero con un temario acotado: hasta ahora, solo está previsto tratar el pedido de licencia de Martín Ferré para permitir que asuma formalmente en Desarrollo Social (y asuma la banca su suplente, Mario Caputo), y la renuncia de Jaime Linares, electo senador nacional por la Provincia.
Por ahora, lejos estaría la cámara Baja de aprobar, en la que será la última sesión del año, temas de importancia para el Ejecutivo, como la ley que regula la actividad de las ferias multipunto, conocidas como “saladitas”, que cuenta con la sanción del Senado.
En tanto, con el correr de las horas se fue desinflando la idea de avanzar con un pedido de informes para que el Gobierno explique los hechos de violencia ocurridos en la Legislatura. La idea había sido motorizada por el presidente del bloque oficialista, Juan De Jesús, pero habría perdido peso.
Las fuentes indican que la iniciativa podría ser enviada a comisiones como una manera de “patear la pelota” hasta que el tema deje de estar en la agenda pública. En ese marco, el FpV ni siquiera realizará una reunión de bloque previo a la posible sesión.
En tanto, en la oposición estudian dos proyectos: uno, impulsado por la Coalición Cívica, busca pedir la interpelación del ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal; otro, más duro aún, pide directamente la renuncia del funcionario, y está siendo elaborado por los dos diputados de Nuevo Encuentro, que contarían con el apoyo de la mayoría de la oposición.
“STAND BY” EN EL SENADO
En tanto, la cámara Alta, epicentro en estos días de la polémica generada por los incidentes del lunes, las posibilidades de sesionar la próxima semana se diluyen. Si bien estaba prevista una sesión para el miércoles o jueves, desde la presidencia a cargo de Gabriel Mariotto aún no enviaron ninguna convocatoria, por lo que el intento podría fracasar, o incluso quedar para la última semana del año, entre las fiestas de Navidad y Año Nuevo.
La falta de sesiones en el Senado impediría la aprobación de normas que fueron pedidas por Scioli durante su asunción, como la ley de Adopción y la Ley Marco de Regionalización. No obstante, ambas iniciativas están “en carpeta” y si bien hasta el viernes no se habían registrado movimientos en pos de que sean llevados al recinto, no se descarta una movida de última hora.
Al mismo tiempo, parece una decisión tomada la de postergar aprobación del presupuesto de la Cámara, que además debe ser ratificado por Diputados. En ese contexto, Mariotto tiene tomada la decisión de prorrogar el presupuesto 2011 del cuerpo hasta que comience el próximo período legislativo, y hacer votar el nuevo en marzo. (DIB)