* Nacido en la localidad de Facundo Quiroga, se estableció tempranamente en la ciudad de La Plata.
* Integra diversas instituciones vinculadas con la difusión de la historia, entre las cuales pueden mencionarse el Instituto Belgraniano de la Provincia de Buenos Aires y Instituto Almafuerteano de la Provincia de Buenos Aires.
* Como periodista se ha destacado en medios de comunicación escrita, tanto en diarios como en revistas.
El nombre de Juan José Terry se encuentra íntimamente ligado al Instituto Belgraniano, institución que preside desde hace varios años. Durante muchos años, acompañado por otros destacados historiadores, se ha encargado de difundir diferentes aspectos de la vida del prócer, tanto a través de escritos como de conferencias.
Nacido en la localidad de Alfredo Demarchi (Estación Facundo Quiroga) el 20 de abril de 1937, se radicó tempranamente en la ciudad de La Plata. Durante muchos años ejerció el periodismo en diarios y publicaciones diversas, así como la docencia.
Relacionado con colectividades italianas y griegas, entre otras, tuvo asimismo afín y exquisita apreciación por todas las cosas del arte (literatura, música, plástica, etc.), y con tal aspiración, viajó por casi todo el mundo reflejando sus experiencias en notas periodísticas de singular valimiento.
Preside desde hace mucho, el Instituto Belgraniano de la Provincia de Buenos Aires y es vicepresidente del Instituto Almafuerteano de la Provincia de Buenos Aires, habiendo integrado e integra diversas instituciones científicas, históricas, culturales y de bien público, tales como la Fundación Juan Vucetich, el Centro de Estudios Nacionales de Historia y Literatura “Leopoldo Lugones”, la Sociedad Argentina de Escritores (SADE), el Instituto Literario “Horacio Rega Molina” de la República Argentina y el Complejo Cultural y Biblioteca “Enrique Gonino”, entre otras.
SU MIRADA SOBRE LA FIGURA DE BELGRANO
En las muchas entrevistas periodísticas que, en su carácter de presidente del Instituto Belgraniano le han efectuados a lo largo de tantos años, Juan José Terry jamás olvida del momento en que vislumbró la figura de Belgrano por primera vez. Y es que si bien –como a la mayoría de los escolares argentinos- le habían hablado del creador de la Bandera desde muy pequeño, fue recién en su adolescencia y gracias a un profesor de Química que se enteró realmente todo lo que aquel hombre significó. Desde entonces y pese a lo mucho que ha leído acerca de su vida, Terry asegura que no termina de descubrir en él nuevos motivos de admiración.
“Me hice belgraniano durante mis años de secundaria en el Normal 3 y gracias a un profesor. Se llamaba Carlos González Costa y aunque daba Química y Anatomía entre otras materias, se pasaba las clases hablándonos de Belgrano. Para él encarnaba no sólo la libertad sino todo un ideal de país. Fue él quien me invitó a formar parte del Instituto y es por él que hoy sigo acá”, cuenta Juan José.
Como Presidente del Instituto Belgraniano de la Provincia de Buenos Aires, Juan José Terry ha encabezado formalmente una pasión patense con ramificaciones en todo el país: la pasión por la vida y la obra delcreador de la Bandera.
En La Plata, más de una decena de profesionales de diversas ramas se reúnen con regularidad para hablar sobre la figura de Manuel Belgrano y buscar la forma de que las nuevas generaciones lo conozcan un poco mejor.
“Belgrano fue tal vez la personalidad más completa que ha dado nuestro país. Además abogado y militar, fue escritor, periodista, un fuerte impulsor de la educación y un estadista excepcional. Pero a su vez fue una persona muy interesada en todas las cuestiones de su tiempo: no sólo reguló el comercio en el Río de la Plata, sino que se ocupó también de impulsar la industria, la agricultura y la red de caminos para el país que comenzaba a surgir”, explica Juan José Terry, en una entrevista periodística realizada años atrás.
Entre los artículos que Terry ha publicado acerca del prócer pueden citarse “Belgrano: el prócer de las libertades y el desarrollo”, publicado en “El Día”, La Plata, el 25 de mayo de 2010: “El legado de Belgrano y una deuda de La Plata”, publicado el 29 de febrero de 2016 y “El legado de Belgrano aún nos inculpa” del 20 de Junio de 2017.
PALABRAS FINALES
La figura del general Belgrano ha sido rectora en la vida de quien nos ocupa. No ha dudado en afirmar que, en un tiempo en que algunos valores parecen estar en crisis, “es importante no perder de vista su ejemplo de entrega por el país”.
“A pesar de que Belgrano había nacido en el seno de una familia muy rica, al morir era tan pobre que estuvo ocho días insepulto porque no disponía siquiera del dinero suficiente para su inhumación. Toda su fortuna fue para la patria: donó cada uno de sus sueldos como militar para aliviar el erario público y los premios que le dieron por las batallas de Salta y Tucumán los destinó a la fundación de cuatro escuelas”.
Movidos por una admiración similar a la que siente Juan José, decenas de personas se han acercado al Instituto Belgraniano a lo largo de su más de sesenta años de trayectoria: desde historiadores y académicos hasta personas de la más humilde formación intelectual.
“La admiración -asegura Terry -por Belgrano no tiene límites. Hace unos años se acercó a nosotros un señor que vendía hilos de coser en la calle y que a pesar de llevar una vida muy apretada, juntó cada una de las monedas que le sobraban para comprar una bandera que nos donó. Esa bandera estaba destinada al mástil del monumento de la Plaza Belgrano, donde antes estaba nuestra sede, y que él mismo se ofreció a custodiar sin cobrar nada a cambio. Así de fuerte es la admiración y el cariño que llega a despertar la figura de Belgrano”.