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Nueve de Julio
domingo, diciembre 15, 2024

Julio Heredia. Una trayectoria de servicio

* Nacido en Chascomús, ingresó en plena juventud al Automóvil Club Argentino, donde viene trazando una carrera de más de 50 años.
* Practicó el box y el fútbol y, junto a su esposa, fue uno de los grandes promotores de la Escuela de Ajedrez de esta ciudad.
* Permanente luchador por la integración de las personas con discapacidad, en 9 de Julio fue colaborador del Centro de Estimulación Temprana, de la Asociación de Ayuda al Discapacitado “Nacimos para ti”, de AFAPDI, y del Consejo Municipal para las Personas con Discapacidad, entre otros.
* Participó en programas radiales y en el periodismo ofreciendo su palabra esclarecedora sobre temas vinculados con la discapacidad.
* Durante casi veinte años ha sido concesionario de la estación del Automóvil Club Argentino local y, próximamente, se alejará de 9 de Julio para retornar a su terruño, la ciudad de Chascomús.

Julio Heredia.

En poco tiempo, la familia que encabezan Julio Heredia y María Guillermina Medrano, radicada en esta comunidad desde hace casi dos décadas, retornará su terruño natal, Chascomús. Establecerán allí su domicilio, luego de vivir entre nosotros por largos años, en los cuales Julio se desempeñó como concesionario y jefe de la Estación del Automóvil Club Argentino (ACA) ubicada en la Ruta Nacional N° 5.
Julio junto a su esposa e hijos se hicieron parte de 9 de Julio y, considerándose hijos adoptivos de esta ciudad, trabajaron sobre todo en diferentes acciones comunitarias. Vinculados a las instituciones nuevejuliense, sobre todo aquellas ligadas a las personas con discapacidad, se brindaron generosamente.
Julio Heredia nació en la ciudad de Chascomús, el 9 de febrero de 1955, en el hogar formado por José Manuel y Elida, es el noveno de once hermanos. Su padre, se había desempeñado como intendente interino de Chascomús.
Sus estudios los cursó en su ciudad natal, donde también transcurrió su juventud. Fue creciendo al cobijo del amor de su madre, que era un ser maravilloso, según ha rememorado el propio Julio.
Contaba apenas diecisiete años cuando ingresó en el Automóvil Club Argentino (ACA).
Al principio, comenzó a trabajar en la playa de la estación de servicio de Chascomús, luego fue pasado los sectores de mantenimiento, limpieza y gomería, entre otras, hasta que, en 1980, se incorporó en el área de administración. En 1981, Julio, fue nombrado jefe del ACA de Punta Indio.

EL BOXEO Y EL FUTBOL, DOS PASIONES
Siendo muy joven, Julio Heredia comenzó a practicar el boxeo. Su debut tuvo lugar en General Belgrano; en una primera etapa peleó en la categoría de Medio Pesado y, más tarde, pasó a Pesado.
Sus primeros triunfos los obtuvo ante tres pupilos de Emilio Battistesa, el conocido manager del tucumano Horacio Saldaño, quien peleó por el título del mundo.
Con Battistesa, Julio había comenzado a entrenar en el Luna Park, pero al poco tiempo, cuando estaba a punto de debutar en ese ámbito, se produjo el inesperado fallecimiento de su entrenador.
Julio fue finalista en el Campeonato Argentino de 1981, de la Asociación Argentina de Box, y se encontró muy cerca de convertirse en profesional.
Como boxeador amateur peleó en La Plata, Pergamino, General Madariaga, Buenos Aires y Dolores , entre otras ciudades, alcanzando buenos resultados.
En su juventud, también practicó el fútbol, integrando algunos equipos en clubes de barrio en Chascomús.

9 DE JULIO, SU HOGAR DURANTE DOS DECADAS
Julio Heredia vino por primera vez a la ciudad de 9 de Julio en 1981, para realizar una suplencia a quien se encontraba al frente de la estación del Automóvil Club Argentino local, que había salido de vacaciones. En esa oportunidad estuvo por un espacio breve, de no más de treinta días.
Varios años después, en los años 1983 y 1985, volvió para hacer otras suplencias hasta que, en septiembre de 1990, se estableció en 9 de Julio, por un espacio mayor de tiempo, para ocupar la jefatura de la filial del ACA. Este cargo lo desempeñó hasta diciembre de 1993 en que fue trasladado a otra sede.
El 17 de agosto de 2005, Julio Heredia retornó a esta ciudad, como concesionario de la estación de servicio del Automóvil Club Argentino. A partir de entonces, tanto Julio como su esposa Guillermina, no dudaron en insertarse en la comunidad nuevejuliense.

Julio Heredia.

LA INTEGRACION DE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD
Julio Heredia, en las dos ocasiones en que le ha tocado residir en 9 de Julio de manera más prolongada, ha trabado intensamente en favor de la integración de las personas con capacidades diferentes. De una manera absolutamente generosa se brindó a la comunidad y ha ofrecido un espacio de integración a jóvenes discapacitados para que puedan desempeñarse laboralmente.
Cuando nació su hija, María Eugenia, en Ensenada, con Síndrome de Down (SD), Julio comenzó a formar parte de algunas instituciones como APADIM y emprendió una acción intensa, con la certeza de que «toda gran caminata comienza con un pequeño paso».
En la primera etapa en que Julio vivió en 9 de Julio estuvo vinculado al Centro de Estimulación Temprana, donde asistía su hija. En aquel entonces, no estaba del todo difundido en la sociedad el conocimiento acerca del Síndrome de Down . En consecuencia, la entonces directora del Centro de Estimulación junto a Julio brindaron charlas a la comunidad de padres del Jardín de Infantes donde asistía Maru.
«Cuando Maru comenzó la escuela primaria, ya nos encontrábamos nuevamente en Chascomús. Teníamos en claro que nuestra meta era, fundamentalmente, la socialización, su integración en la sociedad. Si preparamos bien a nuestros hijos y les damos las oportunidades que merecen, pueden llegar a ser personas muy útiles para la sociedad», recordaba Julio en una entrevista mantenida con EL 9 DE JULIO, el 16 de junio de 2012.
Su hija cursó los nueve años de la escuela común y merced al trabajo de Julio, de su familia y a sus cualidades personales de Maru, ella se encuentra hoy completamente integrada al mundo del trabajo y a la sociedad, complementándose notablemente bien. Un gran ejemplo para la comunidad.
uando Julio Heredia retornó a 9 de Julio, después de más de una década, se reencontró con algunas familias conocidas, con viejos amigos y con una comunidad que iba cambiando favorablemente; pero al mismo tiempo, halló que en algunos aspectos, la sociedad parecía detenida.
“Me llamó la atención -rememoraba en una entrevista mantenida con EL 9 DE JULIO, el 16 de junio de 2012-, cuando regresé a 9 de Julio, después de doce años, encontrar un Taller Protegido con los mismos operarios de aquel entonces; lo que daba cuenta de un Taller con una sola puerta de entrada pero sin salida; con una sociedad que no se abría para darles trabajo; con una escuela que no se disponía para buscarles un futuro”.
Con la finalidad de que los chicos con discapacidad tengan la posibilidad de integrarse al mundo del trabajo, para que puedan intercambiar con las demás personas; como así también en la vida social, fomentando que ellos compartan con las demás personas las diferentes manifestaciones, Julio se integró en las comisiones de la Asociación de Ayuda al Discapacitado “Nacimos para ti” y de AFAPDI.
También ejerció, durante varios años, la presidencia de la Mesa Directiva del Consejo Municipal para las Personas con Discapacidad, desde donde desplegó también una importante acción.
Dialogar con Julio Heredia, es una experiencia sumamente enriquecedora. Posee la característica singular de ofrecer al interlocutor un diálogo ameno y sumamente respetuoso, abierto a las ideas y al pensamiento y siempre dispuesto a aceptar la opinión diferente.
Por ellos, en los años en que mantuvo su columna periodística en el programa “Mentes Abiertas”, que conducía el recordado periodista Fernando Durigan, dirigió su palabra esclarecedora sobre diferentes temas vinculados con la discapacidad y la integración de las personas con capacidades diferentes en esta ciudad. Conocedor profundo de estas cuestiones que forman parte de nuestra realidad como sociedad, a veces poco difundidas, pudo mantener en el aire radial debates con autoridades oficiales, demostrando siempre respeto por su interlocutor y amplitud de pensamiento.

Julio Heredia en 2014, siendo presidente del Consejo Municipal para las Personas con Discapacidad.

EL AJEDREZ
Julio Heredia junto a su esposa Guillermina fueron permanentes colaboradores de la Escuela de Ajedrez “Héctor D. Rossetto”, con la que ha participado en algunas competencias zonales.
Junto a su hermano mayor (fallecido), que era periodista y se desempeñó como jefe de redacción del diario «El Imparcial» de Chascomús, en tiempos en que Raúl Alfonsín era director de ese medio de prensa, compartió su pasión por el ajedrez. Si bien comenzó a jugar siendo muy joven, en el tiempo en que el gran Bobby Fischer deslumbraba con sus triunfos, debieron pasar varios años hasta que, ya radicado en 9 de Julio, reanudó las prácticas, incentivado por el instructor internacional Ricardo Pereyra, que entonces dirigía la escuela.
En marzo de 2013, Julio fue elegido presidente de la comisión directiva de la Escuela de Ajedrez. En esa oportunidad, lo acompañaron Eduardo Tinetti (vicepresidente), Luján Yaconis (secretaria), Néstor Gutiérrez (tesorero), Guillermina Medrano, Luis García y Jorge Martino, entre otros. Gracias a sus gestiones, fue conseguida en préstamo la sede de la Federación de Asociaciones Cooperadoras Escolares Nuevejuliense (FACEN) para realizar las clases y encuentros de ajedrez.
Un año antes, en 2012, la Escuela había participado en el Gran Prix provincial de ajedrez, con un gran esfuerzo; y, al año siguiente, en julio de 2013, 9 de Julio fue una de las sede del Gran Prix. Este Gran Prix se llevaba jugando desde hacía catorce años y participaban entre catorce y dieciséis ciudades. A partir de entonces se incorporó la ciudad de 9 de Julio entre sus fechas y, desde luego, eso fue posible principalmente por el gran compromiso de Julio Heredia y de su familia.
Al asumir la presidencia de la Escuela, Julio se había propuesto consolidad el ajedrez en nuestra comunidad y, merced a un trabajo serio y constante, logró su objetivo. Tuvo el acompañamiento de su esposa Guillermina que, durante estos años, ha sido el alma de la Escuela.
Su hijo Valentín Heredia, formado en la Escuela de Ajedrez de 9 de Julio, no solamente se constituyó en un referente a nivel local, sino sobre todo nacional y con proyección fuera de los límites geográficos del país. Jugador y Profesor del Club Argentino de Ajedrez, ha participado en el IRT V Abierto Internacional de Ajedrez. En 2022 se consagró Campeón Metropolitano de Ajedrez en Buenos Aires y Campeón Invicto en su categoría, entre otros grandes títulos.

Julio Heredia en contacto con la prensa en ocasión de disputarse, en 9 de Julio, una de las fechas del Gran Prix provincial de ajedrez.

SU FAMILIA
La familia de Julio Heredia está conformada por tres hijos. De su primer matrimonio con Marta (fallecida) nacieron dos hijos, un varón y una mujer, Alejandro y María Eugenia. De su segundo matrimonio con Guillermina, nació otro hijo varón, Valentín.

PALABRAS FINALES
En estos días en que, Julio Heredia y su familia, se aprestan a dejar la ciudad de 9 de Julio para retornar a su terruño, la ciudad de Chascomús, Diario EL 9 DE JULIO volvió a dialogar con él, como tantas veces lo ha hecho periodísticamente.
Julio Heredia es una persona íntegra, de una profunda consustanciación con los valores espirituales que se centran la vida de todo hombre de bien: la dignidad, el desinterés, la honestidad, el honor, el respeto por los demás y el gusto por las cosas bien hechas.
“Hace pocos años –explicó- falleció mi hermana mayor y luego fallece la más chica. De una familia de once hermanos, hemos quedado ocho. Por eso, queremos fortalecer el vínculo con nuestra familia, regresando a Chascomús, donde viven los otros hermanos”.
“Solamente una de mis hermanas vive en Bahía Blanca, pero me prometió que ni bien retorne a Chascomús, ella también volverá allí. Así que volveremos a estar todos juntos nuevamente en ese lugar tan querido, con tantos recuerdos”, señaló.
Julio subrayó que “la idea de volver a Chascomús no es con la finalidad de descansar solamente; pues siempre hay algo para hacer, porque siempre hay personas que pueden necesitar nuestra ayuda”.
“Los nuevejulienses –añadió- nos hicieron sentir todos estos años como hijos adoptivos. Mucha gente que no nos conocía nos brindó generosamente su amistad, nos abrió las puertas de su casa. En 9 de Julio dejamos un lugar muy querido. La familia Heredia va a estar siempre agradecida para con la ciudad de 9 de Julio”.
“En cada brindis de la familia Heredia, siempre se alzará la copa por la ciudad de 9 de Julio y su gente, por los muchos amigos que dejamos aquí”, concluyó con emotivas palabras.

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