[5 de enero de 2010] En este verano 2010, en el marco de un ciclo húmedo que comenzó en los últimos meses, el pasto crece más de lo habitual. Las lluvias, que se ausentaron años anteriores en enero, contribuyen a la vegetación más abundante como así también a una presencia mayor de los mosquitos.
El problema de los terrenos no utilizados, con falta de mantenimiento, vuelve a aparecer año tras año y ahora cobra mayor dimensión. No sólo se trata del mal aspecto que presentan sino que se crean las condiciones ideales para la proliferación de insectos y animales.
Desde la Municipalidad es necesario redoblar esfuerzos para mantener el buen estado en los lugares que le compete y, al mismo tiempo, hacer cumplir a los vecinos que no cumplen con su obligación.