[8 de marzo de 2010] El complemento casi fue un calco de los primeros minutos de la parte inicial, con Once Tigres otra vez como el protagonista absoluto y Mones Cazón sin poder encontrar el rumbo del pleito. Al minuto, Maccagnani tomó una pelota al borde del área grande, se quitó a su marcador de encima y sacó una media vuelta, que se fue acariciando el palo derecho de Odriozola.
Dos minutos después, Ascani hizo un jugadón, arrancó desde la media luna del circulo central, dejó en el camino a rival, y descargó de primera para Daniel González, que entrando por la banda derecha, sacó un latigazo abajo contra el primer palo y puso otra vez a la visita en ventaja.
Pero sólo dos minutos le duró la alegría a Once Tigres, ya que Hidalgo luchó una pelota en el área grande, y Villalba, con el afán de rechazar, le llevó puesta la pierna al delantero. El árbitro dio la pena máxima, y Bernard, con un remate a media altura y fuerte, volvió a empatar el partido.
Once Tigres siguió intentando y Mones Cazón empezó a perder el orden, sobre todo en el medio juego. A medida que pasaban los minutos, el equipo se hacía cada vez más largo. A los trece minutos, Ascani ganó por el andarivel derecho, sacó un centro al corazón del área, Maccagnani se elevó más que nadie, y su cabezazo hizo temblar el travesaño de Odriozola. Pero a los dieciséis minutos, llegó el tercer estallido visitante: un tiro libre al borde del área, lo tomó Maccagnani, y puso la pelota en el palo de Odriozola: un verdadero golazo.
A partir de este momento, el equipo pehuajense se desordenó aun más y empezaron a aparecer los espacios para la visita. A los dieciocho minutos, otra vez quedó mal parada la defensa local, Ascani ganó en velocidad y le puso la pelota justa a Maccagnani, que solo y sin marca, remató y el balón dio en la pierna salvadora de Odriozola.
Once Tigres era el que más tenía la pelota, mientras que Mones Cazón entraba en la desesperación y no era profundo a la hora de llegar al arco de Torres. Pero en una buena jugada de Hidalgo por la derecha, envió un centro al medio del área, Funes alcanzó a cabecear, el esférico se estrelló en el travesaño, y el rebote le quedó a Moretti, y el remate del defensor se fue cerca del palo izquierdo de Torres, que ya nada podía hacer.
Cuando se jugaban treinta minutos, una falla de la última línea, un defensor pehuajense se llevó puesto a Martín, que estaba ya en la cancha. Fue penal, que Ascani convirtió en gol, con un remate a media altura al palo derecho de Odriozola, que fue para el otro lado. A partir de ese momento, el partido se terminó: Mones Cazón apostó a alguna jugada aislada, pero con poca fortuna. En cambio, Once Tigres manejó los espacios de buena manera, hizo control de balón, dejó que corrieran los minutos, hasta que los cuarenta y ocho minutos, el arbitro Acosta le bajó el telón a este partido.