[7 de abril de 2010] * Una estimada convecina y lectora del Diario EL 9 DE JULIO realizó tiempo atrás un viaje por América del Norte. Su experiencia en esa ocasión ha sido muy rica y la compartirá con nuestros lectores, a través de interesantes semblanzas. Aquí la primera parte de “Conocido Canadá”.
Canadá es una monarquía constitucional parlamentaria. Fue inicialmente constituida a través del Acta Británica de América del Norte de 1867 y llamada EL DOMINIO DE CANADA.
Es miembro de la Mancomunidad Británica de Naciones. Tiene un Gobernador General que actúa como Jefe de Estado y es el representante de la reina Isabel II, que es también la reina y Jefa de Estado.
Comprende todo el norte del continente americano, excepto Alaska que pertenece a los EE.UU. Canadá es un país que quiere tener un perfil bajo. No es primero en nada, salvo en tener embajadas en todos los países del mundo. No quiere despertar la codicia de ningún otro país. La naturaleza y la suerte han hecho que sea segunda en extensión en todo el mundo, después de Rusia y antes que China. Es también segunda en riqueza forestal, en minerales y en metales. Pareciera que se huele la riqueza en sus calles…
Haciendo un poquito de historia digamos que fue descubierta en 1497 por Juan Cabot, pero los primeros ensayos de colonización se debieron a los franceses Cartier y Champlain. El rey de Francia Francisco I le encargó a Cartier buscar un paso que uniera los actuales océanos Atlántico y Pacífico por el norte de América. Reconoció la isla de Terranova y remontando el río San Lorenzo descubrió el Canadá.
En Europa, Inglaterra y Francia estaban en lucha y esa lucha estalló también en el Nuevo Mundo y a comienzos del siglo XVIII los ingleses se fueron adueñando de las posesiones francesas. Quebec fue tomada por los ingleses en una batalla que duró apenas 20 minutos, a pesar de estar amurallada y con numerosos cañones. En 1763 se firmó la paz de París por la cual Francia entregaba a Inglaterra todas sus posesiones al este del Misisipi.
Los canadienses de origen francés jamás perdonaron a los ingleses esta usurpación. El mismo De Gaulle cuando era presidente de Francia, desde el balcón de la casa de gobierno de Quebec proclamó: ’’VIVA QUEBEC LIBRE’’. En la patente de los automóviles junto al número y nombre de la ciudad se lee una inscripción que dice en francés: ’’YO ME ACUERDO’’, inscripción ésta en franco repudio a los ingleses.
La bandera de Canadá tiene dos franjas rojas verticales y una blanca al medio. En esta última hay una hoja de arce. Así como la flor de lis simboliza a Francia, la hoja de arce es distintiva de Canadá. Infinidad de objetos la reproducen: posa vasos, bufandas, frascos de todo tipo. En los primeros años de la colonización los troncos de los bosques talados eran enviados por el único camino natural existente: el río. Por accidentes del mismo, muchas veces los troncos se desataban y giraban en el agua a mucha velocidad. No queriendo perderlos se tiraban al agua los leñadores y en los remolinos de los troncos muchos de ellos perdieron la vida. Había una excepción. Determinados troncos por su peso específico, se deslizaban sin girar. Finalmente optaron por recoger sólo éstos. Eran troncos de arce, cuya madera es muy dura.
Es probable que talvez por eso hayan elegido su hoja como parte del símbolo patrio de su bandera, como sinónimo de estabilidad.
Llegando al momento actual y en cuanto a su forma de Estado, es un Estado Federal, siendo su Jefe de Estado el monarca británico. Es tradición que el monarca elija quien sea el Gobernador General entre los nombres de cuatro candidatos que desde Canadá se le envían. El último elegido es una mujer nacida en Haití. Su nombre fue el único que se envió rompiendo una tradición de siglos. Lo curioso del caso es que esta señora, periodista muy inteligente, abogaba por una Quebec libre. Hoy ha cambiado de idea y lucha por un Canadá unificado.
TORONTO: Fue la primer ciudad que visitamos. Es la capital de la provincia de Ontario y está a orillas del lago del mismo nombre. Tiene casi cuatro millones y medio de habitantes con la aglomeración urbana.
Hay tantas cosas que son extraordinarias que es difícil seleccionarlas. Empecemos por el puente Eaton. Atraviesa una calle a la altura de un primer piso. Une dos emporios Comerciales, cada uno de ellos con varios pisos y con artículos de lujo, de precios elevados y de la más diversa índole. Algo así como dos Galerías Pacífico unidas por un puente a través de la calle Florida.
Torre CN: Tiene 550 m. de alto. Dicen que es la más alta del mundo. Fue construida por quienes tendieron la línea ferroviaria del Atlántico al Pacífico. El ascensor que nos elevó casi hasta las nubes, era tan rápido que sugirieron taparse los oídos para no sufrir los cambios de presión. En el último piso está el restaurante. Había nubes muy bajas ese día, así que no se pudo apreciar mayormente la vista de la ciudad, pero si degustar una excelente comida.
Tres meses después de este viaje me entero que en Dubai se ha inaugurado la torre más alta del mundo, con 828 metros. En la noticia se lee que esta torre ha superado en unos 300 metros al que era considerado el rascacielos más alto del mundo: la torre Taipei 101 en Taiwan. ¿Dónde queda la de Toronto?
La Real Corona Holandesa todos los años envía religiosamente 200.000 bulbos de tulipanes de regalo. Uno se pregunta el por qué de este gesto tan generoso. Es que era inminente el nacimiento de un nuevo miembro de la familia real holandesa y al nacer en Canadá el bebé sería un extranjero en su patria. Canadá no podía permitirlo y donó a la Corona Holandesa todo el predio donde se iba a producir el alumbramiento. Así pues el bebé fue holandés, ya que nació en territorio holandés. He aquí el por qué de los envíos florales, como muestra de eterna gratitud.
La Asamblea Legislativa: el edificio de esta Asamblea se eleva en el centro de un parque muy verde y con muchas flores. Cualquiera que visite este Palacio puede asistir a los debates desde las tribunas reservadas a los visitantes. Se observa la riqueza en
madera y mármol de las escaleras y las galerías, los retratos de primeros ministros y de presidentes de la Asamblea, como también los bustos de canadienses célebres que han hecho la historia de Ontario. El Presidente de la Asamblea supervisa las deliberaciones. Su autoridad está simbolizada en una especie de ”Bastón de Mando”. El sargento de armas, encargado de la seguridad de la Sala, es el que lleva este bastón y conduce el desfile del Presidente a la Sala. El Parlamento no puede sesionar si este Bastón no está en la Sala.
Cinco cámaras de televisión trasmiten los debates parlamentarios en directo.
PLAZA DE CALATRAVA: La bautizamos así porque fue ese arquitecto español quien la diseñó. El mismo que en Puerto Madero en Buenos Aires, hiciera el Puente de la Mujer. Se entra a la plaza y no se puede creer. Esta íntegramente techada con vidrio sostenido por un armazón artístico de metal. Lo mismo hicieron con una calle adyacente.
En ella respetaron la edificación que había. El techo de vidrio, elevadísimo, sugiere el techo de una inmensa catedral. No se puede creer tanta belleza. Parece algo mágico.
El edificio de oro: Tiene alrededor de 60 pisos. Está realizado en vidrio y metal. Cada vidrio está laminado en oro. El conjunto adquiere un color dorado que brilla mucho al sol y que lo hace diferente a todos los demás. Dicen que el oro fue provisto por la Banca Nacional de Canadá. Tal es la riqueza de este país.
Los hospitales: Son gratuitos para los canadienses. El gobierno le paga a los médicos los servicios que hayan prestado. Cuanto más pacientes tenga un médico, más será lo que reciba del gobierno. La cirugía plástica no entra en estos planes. Sí, la cirugía reparadora.
Inmigrantes: Con un solo dato nos damos cuenta de la cantidad de inmigrantes que hay en la ciudad. Se editan 27 periódicos diarios en distintos idiomas. Hay un barrio chino con algunos habitantes que nunca salieron de él y nunca aprendieron ni el inglés ni el francés.
Un poco asociado con el tema de la inmigración y la necesidad de poblar Canadá, está el tema de las asignaciones familiares. Cuando nace un hijo se les otorga un beneficio de 7.000 dólares y 450 dólares más en forma mensual y hasta la mayoría de edad.
Subterráneos: Debimos hacer combinación de subterráneos para ir a cenar a un barrio muy selecto, llamado York Bild. Fue tan cómico lo que allí nos pasó que no puedo dejar de mencionarlo. Las máquinas no aceptaban billetes de 20 dólares. Había que recurrir al cajero quien por 20 dólares vendía de a dos o de a cinco pasajes. Todavía no puedo entender el por qué de esto. Las explicaciones que daba no se entendían. La cola de pasajeros aumentaba y las explicaciones casi a los gritos, seguían sin entenderse.
CATARATAS DEL NÍAGARA: El río que une los grandes lagos de Erie y Ontario se llama Niágara. Un desnivel en el cauce hace que se formen dos grandes caídas de agua. Nada más que dos grandes caídas. Me lleno de orgullo cuando pienso en nuestras hermosísimas Cataratas del Iguazú que hoy han sido elegidas como una de las siete bellezas naturales del mundo. El paseo en barco es inolvidable y divertido. Provistos de pilotines de la cabeza a los pies, paseamos casi hasta tocarlas. El agua nos caía desde arriba y también en forma horizontal, desde los costados.
La infraestructura que tienen es muy buena. Hay balcones al pie de las Cataratas desde donde se tiene una vista distinta. Es increíble la cantidad y belleza de las flores que hay en ese lugar. Nos dijeron la cantidad de millones de dólares que dejan anualmente los turistas. Alrededor de 100 millones para una población de 10 o 12 mil habitantes del pueblo en el que están.
NIÁGARA ON THE LAKE: Es un pequeño pueblo de unos 7.000 habitantes. Todos de un poder adquisitivo muy alto. En sus avenidas hay enormes macizos de flores y boutiques con mercadería de marcas mundialmente conocidas. Lo que más llama la atención es su hotel “Príncipe de Gales”.
Dicen que era la mansión del príncipe en sus vacaciones. Hoy esta abierta al público. Se veían detalles de gran lujo, por ejemplo en los baños. Lavatorios de un tamaño algo mayor que los habituales y con preciosas y anchas guardas de flores en su interior, picaportes que parecían tener un baño de oro, etc., muebles, boisserie y vitraux se conservan intactos.
MIL ISLAS. UNA LEYENDA INDÍGENA: Manitou, el Gran Espíritu de los aborígenes, estaba en su vivienda celestial muy dolorido por las contínuas peleas de los hombres. Decidió ayudarlos y corriendo la cortina celestial llegó a la tierra con un bulto grande envuelto en una manta. Lo depositó a orillas del río San Lorenzo y reuniendo a las personas, les dijo que disfrutaran del hermoso jardín que les había llevado, pero que no pelearan porque lo podían perder. La paz no duró y pronto comenzaron las peleas. Manitou volvió y les dijo que se llevaba el jardín porque no respetaron lo que él les pidió, ya que habían vuelto a la guerra. Envolvió el jardín en la manta y subió a la mansión celestial.
Al llegar a ella y correr la cortina, la manta se rompió cayendo a la tierra el jardín, roto en mil pedazos. Esos pedazos de jardín son las hermosísimas mil islas, aún más embellecidas por la mano del hombre y que constituyen ese lugar paradisíaco.
En realidad las islas son muchas más, pero se redondea en esa cifra porque tiene más marketing. Están en la desembocadura del lago Ontario en el río San Lorenzo. Como el lago se comparte con Estados Unidos, la línea divisoria de las aguas establece el límite. Se da el caso curioso que entre dos de esas islas esté el puente internacional más corto del mundo, ya que una de ellas pertenece a Canadá y la otra a Estados Unidos. Entre un extremo y otro del puente, habrá unos diez o quince metros.
El castillo Boldt: George Boldt llegó a Nueva York siendo un adolescente. Su primer trabajo fue en la cocina de un hotel. Pronto llegó a ser un muy importante hotelero. Finalizando el siglo XIX pasó un fin de semana en Mil Islas. Quedó tan atraído por la belleza del lugar que poco después se apropió o compró, no se sabe bien, una isla en forma de corazón con la intención de hacer un castillo y regalárselo a su esposa. Tenía el castillo 120 habitaciones que costaron 2.500.000 dólares. La esposa de Boldt no alcanzó a conocerlo porque murió apenas iniciado el siglo XX.
El señor Boldt profundamente dolorido dicen que jamás volvió a la isla.
Hubo otros que si lo hicieron a otras islas. Fueron millonarios que hicieron un paseo de magníficas mansiones. Si bien el invierno dura 6 meses y la temperatura baja a 30 grados bajo cero, estos millonarios siguieron construyendo, aunque los materiales no eran llevados en barco, que les costaba a muchísimo, sino por el agua helada del lago y en camiones. Las aguas como la tierra se hielan hasta un metro y medio de profundidad. Sondeando el lago helado se hacen caminos con banderas de distintos colores. Según el grosor del hielo circulan por esos caminos los camiones o los autos.
Según cuentan los lugareños, un yerno que malquería a su suegra, la llevaba en primavera a una de esas islas que tenía el nombre de “Terreno justo” por tener una única casa. Como la pobre señora no sabía nadar, recién podía volver con su hija en el invierno, ya que entonces lo podía hacer caminando por el lago helado.
OTAWA: Es la capital de Canadá. Allí reside su gobernadora. Pudimos entrar con todo el contingente a los jardines de su residencia sin ningún problema. El guía nos había anunciado que nos alojaríamos en la casa de Mikey Mouse. Así, jocosamente, hacia alusión al nombre del hotel: el She raton, el Sheraton.
Museo de la civilización: Funciona en un edificio con forma de barco y que está hecho ex profeso para el Museo. Las columnas exteriores que lo sostienen semejan enormes remos con las palas hacia arriba. El mascarón de proa es una cara, los ojos son dos ventanas, la nariz una moldura del edificio y la boca, la puerta de entrada. Para ver esto se necesita bastante imaginación.
En la planta baja impactan los tótems, algunos con 400 años de antigüedad. En ellos los aborígenes contaban su propia historia. En uno de ellos un oso de gran tamaño ordena a los demás animales que cuiden y protejan al más indefenso de todos ellos: el hombre.
Señala una leyenda indígena que un cuervo, que vemos como volando en lo alto, tiene como misión llevar el alma de los muertos. Cuando regresa a la tierra trae un bebé, en compensación por el alma que se había llevado.
En los pisos siguientes se reproducen las viviendas, las industrias, los trabajos de los primeros colonizadores. Algunas son un perfecto monoambiente: la cama, una mesa y sillas, una estufa cocina y una bacinilla. En otras se ve una rueca y la ropa secándose en una cuerda. Otras representan las tabernas de la época con mesas y bancos alargados. Impacta la figura yacente de un moribundo con el rosario en la mano y un acompañante. Se representaba una de las causas más frecuentes de muerte de los navegantes por carencia de vitaminas: el escorbuto.
El Parlamento: Es un palacio de grandes dimensiones, con una plaza al frente muy amplia que le da una hermosa perspectiva. Por original, llama la atención una fuente de agua y fuego. Pareciera que no puede ser, pero es. Continuamente se esta inyectando un gas que al incendiarse produce ese juego raro de aguas en permanente movimiento y el fuego mezclándose con ellas.
Catedral: Siendo la religión católica una de las que predominan en Canadá, se advierte en sus catedrales el fervor y la riqueza. La catedral de Otawa tiene una característica difícil de olvidar, especialmente si se la ha visto de noche. Sus dos torres son de aluminio. Luces puestas adecuadamente, hacen que estas torres brillen iluminando la noche de Otawa.
Mercado de frutas: En una calle peatonal se disponen los puestos. Las frutas y verduras se alinean con belleza. Pareciera que un arquitecto las hubiera distribuido. Los turistas sacaban fotografías queriendo revivir a posteriori ese momento. Eran sólo frutas y verduras, pero qué espectáculo bonito.
En un restaurant hindú comimos pollo condimentado con especias tan exóticas, que el color de la carne era rojo. Sin embargo no tuvimos problemas digestivos.
Para que tomáramos conciencia de cumplir los horarios que se nos fijaban, el guía estableció un requisito que creó un clima de alegría y distensión. Los demorados para ser readmitidos debían cantar. Solo así el guía les permitía el paso. Fueron muy pocos y cada vez fue una jarana y a veces una sorpresa.
MONT TREMBLANT: Hay centros de sky europeos conocidos mundialmente. Está todo dado para que Mont Tremblant tenga ese destino en América. Además de las pistas para esquiar, tiene campos de golf con increíbles hoteles incluidos y la empresa Ferrari auspicia la realización de carreras internacionales. Todo se da en un paisaje de ensueño. Hay datos para creer en ese futuro auspicioso. Hoteles de cadenas sumamente prestigiosas como lo es la “Marriot”. En Bs. As. el Paza Hotel pertenece a esa cadena y allí se hospedaron entre otros los reyes de España y el sha de Persia. Casas de modas y de deportes que están en las principales ciudades del mundo, también se las ve allí, en esas calles irregulares de montaña, en la parte alta de la ciudad a la que se llega en un teleférico.
QUEBEC: Entre Mont Tremblant y Quebec esta el lago de la Tortuga. Desde allí se puede realizar un paseo en hidroavión bonito, breve y muy caro. Es bonito porque los bosques que se ven desde el aire son espesos y multicolores, tanto que parecen una fabulosa y mullida alfombra. Es breve porque dura alrededor de 20 minutos y es cara porque cuesta 85 dólares. Al precio actual serían unos 16 pesos el minuto.
Quebec es la capital de la provincia del mismo nombre y lo fue de todo el dominio. Está ubicada a orillas del río San Lorenzo y a través de él se comunica con todo el mundo. La parte alta de la ciudad conserva la muralla y los edificios más notables como las iglesias de Santa Genoveva, de Notre-Dame, el Hotel de Ville que es sede del gobierno de la ciudad, y desde cuyos balcones el Presidente De Gaulle exclamara “Viva Quebec libre”.
La Iglesia de Santa Genoveva: Reúne dos detalles destacables. Uno, que en su interior cuelga del techo, a manera de enorme lámpara, un barco hecho a menor escala, símil al de los primeros colonizadores. Otro, en la sacristía entregan dos pancitos del tamaño de la punta de un dedo, para que nunca falte el pan en la mesa. Santa Genoveva es la patrona de Paris. Se dice que con sus oraciones salvó a París de la invasión con que la amenazó Atila.
Basílica Catedral Notre-Dame: Es la primera parroquia católica y la primera catedral de Canadá. Es también monumento histórico. Fue reconstruida varias veces al sufrir importantes daños causados por incendios y por el sitio de Quebec realizado por las tropas británicas cuando todavía el Canadá era la “Nueva Francia”. En la sacristía un mapa ocupa toda una pared. Allí figuran los grandes lagos, el río San Lorenzo y un enorme letrero que dice “Nueva Francia”. Tiene razón la leyenda de las patentes de los autos: ellos no olvidan. Me parecieron hermosas las oraciones escritas que allí nos dieron, una de las cuales transcribo a continuación:
ORACIÓN DE LA ACOGIDA Y
LA AMISTAD
Ayúdame, Señor,
a ser para todos
aquella persona
que espera sin cansarse,
que escucha sin fatiga,
que acoge con bondad,
que da con amor,
siempre que haga falta.
Ayúdame a ser
una persona segura
a la que se pueda acudir
cuando se necesite,
que ofrezca esa amistad que descansa
y que irradia serenidad, paz gozosa.
Quiero estar disponible,
y así, sin hacer cosas extraordinarias,
pueda yo ayudar a los que más amo
a sentirte muy cercano en sus vidas.
Amén
La parte baja de la ciudad, unida a la parte alta por un teleférico, es el barrio comercial y el más antiguo. Las aguas heladas del Atlántico Norte penetran hasta el muelle, permitiendo que transatlánticos con capacidad para 3.000 pasajeros y 2.000 tripulantes puedan atracar allí.
En esta ciudad, con tantas calles que tienen pronunciadas subidas y bajadas, es fácil perderse. El problema radica en que no hay colectivo que expenda pasaje para poder regresar. Hay que comprarlo en determinadas agencias cuya ubicación se desconoce o está muy lejos. Afortunadamente hay quienes, generosos y comprensivos, suelen auxiliar al turista, regalándole los pasajes. Así nos sucedió al alejarnos demasiado de la muralla y quien nos ayudó fue una joven de origen asiático.
Existe en la ciudad un colectivo ecológico que está a prueba y es gratis. Se quiere conocer por anticipado la reacción de la gente. Es eléctrico y con una capacidad reducida. El recargarlo de energía requiere 4 horas y el costo es baratísimo: tres dólares y centavos. Se suma a la ventaja de su bajo costo el de no ser contaminante. Ambas condiciones muy importantes como para que se tenga en cuenta este proyecto.
Una torre de gran altura, aunque bastante menor que la de Toronto, tiene la peculiaridad que el restaurante del último piso es giratorio. Por supuesto que gira muy suavemente, pero permite la vista general de la ciudad.
MONTREAL: El nombre de la ciudad deriva de un pico montañoso que domina en parte la ciudad. Los franceses le pusieron una enorme cruz y lo empezaron a llamar el Mont Real. Poco a poco las dos palabras se unieron y formaron el actual nombre: Montreal.
Esta ubicada al sur de la isla del mismo nombre y a orillas del río San Lorenzo.
Biodôme: Es un museo del medio ambiente. Al mismo tiempo es zoológico, acuario y jardín botánico. Integra paisajes, plantas y animales, ofreciendo cinco ecosistemas.
Selva tropical: En este medio exuberante se ven los linces comiendo y paseando junto al agua que corre como si fuera un riacho o metiéndose en sus cuevas de la montaña. Se ven caimanes que asoman sus cabezas desde el agua en la cual están sumergidos. En los árboles hay pájaros con colores llamativos, pequeñas aves de un color rojo intenso, papagayos, monos dorados chillando y paseando de árbol en árbol, murciélagos a los que les cambiaron lenta y paulatinamente el reloj biológico, para que volaran aún de día y los visitantes los pudiésemos ver y fotografiar sin flashes para no asustarlos. En realidad en ningún sector del Biodôme se permitían los flashes.
San Lorenzo marino: En “agua de mar” fabricada en el mismo Biodôme en una cantidad de 2,5 millones de litros, se veían variados especímenes: una langosta saliendo de su cueva, un pez comiéndose a otro más chico, peces rayados como una cebra, peces de colores, un ave sumergiéndose a buscar comida y saliendo rápidamente.
El bosque laurentino: En la vida real las montañas Laurentinas corren en forma casi paralela a los Apalaches de EE.UU. Tiene especies frondosas y coníferas que permanecen verdes todo el año.
Su flora y su fauna han sido trasladados al Biodôme. En ese bosque encontramos nutrias, puerco espines, castores, etc.
En el Mundo Polar Ártico y Antártico: Pájaros que viven en la península del Labrador o en la Antártida conviven en el mismo escenario del Biodôme. Pingüinos de todo tamaño y en gran cantidad se mezclan con los pájaros bobos.
Australia: Este quinto ecosistema es rotativo. En la época de la visita correspondía al desierto de Australia. Una familia de lemures, se encontraba plácidamente en medio de su ecosistema recreado magníficamente tal como un escenario.
La Iglesia de Notre Dame: Es única. Fue diseñada por un protestante que ni siquiera hizo las 3 naves a las que estamos acostumbrados. El altar mayor es un enorme semicírculo íntegramente cubierto de imágenes, con columnas revestidas de plata. En la parte superior se ve a Jesús coronando a la Virgen. Tiene una iluminación azul celeste que semeja la luz del cielo. El techo tiene 1.500 estrellas de oro.
Su capacidad es de 7.000 fieles. Allí no se celebran casamientos, salvo que los contrayentes tengan una popularidad tan grande como para que puedan llenar la iglesia. Dicen que ese fue el caso de Celine Dion.
La Ciudad Subterránea: Era la frutilla del postre. Dado los 30 grados bajo cero del invierno, uno se imagina con ese titulo una ciudad con calles peatonales pavimentadas, casas de familia, comercios, etc. Nos habían dicho en Bs. As. que en el centro de la ciudad no se veía gente durante el día. Que sí se veía en la periferia y que toda la gente del centro estaba en la ciudad subterránea.
La historia era otra. Los ingleses en eterna puja con los franceses acapararon las tierras céntricas. Los franceses resolvieron hacer sus shoppings subterráneamente. Varios pisos hacia abajo con una maravillosa ventilación, plantas naturales y en algunos sitios hasta luz natural también. Solo visitamos una parte, porque abarca varias manzanas. Nos mostraron grandes fotografías, expuestas allí mismo, con los avatares de la construcción. Lo único que entendí es que mediante una plataforma y columnas, dejaron incólume una catedral de la superficie.
Así llegamos al término de nuestro viaje. Al despedirnos de nuestros compañeros tuve dos sorpresas demasiado halagadoras que transcribo para no olvidarme. Una señora brasileña que estaba festejando sus Bodas de Plata, me besó con mucho cariño y me dijo y me volvió a decir: ”Usted es un ejemplo de vida”. Horas antes una mejicana del Yucatán me besó en la mejilla y tomándome una mano, también me la besó. Nunca nadie lo había hecho y confieso que ni siquiera en el cine había visto que una mujer besara la mano de otra.
El aeropuerto de Montreal fue el punto final del viaje al Canadá.
ANGÉLICA