Acacia negro: Un serio problema para caminos, campos y canales
El primer frente de la batalla ecológica se basa en el cuidado y la preservación del ecosistema natural de una región en particular – En este caso el acacio negro, como especie invasora y considerado ya una plaga, plantea serios problemas para los caminos vecinales, públicos y/o privados, los campos en general y los canales en particular
La ACACIA NEGRA es una especia arbórea exótica y con carácter de invasora que posee una variada y agresiva forma de diseminación.
Entre los efectos perjudiciales se encuentra la invasión de áreas de pastoreo bajo monte, con rápido incremento de su cobertura, disminuyendo la oferta forrajera
Es un invasor común de numerosos pastizales pampeanos argentinos, ya que el ganado gusta de sus legumbres y dispersa las semillas no digeribles (endozoocoria). Se concentran en forma de galería en los arroyos, cañadones y bajos.
Florece en primavera y fructifica en verano. Las hojas contienen sustancias químicas que evitan que proliferen debajo de los árboles otras especies de plantas… CEREALES….. y compitan por el espacio.
Todo productor rural conoce desde hace añares las dificultades que plantea la proliferación del acacio negro, una especie extraña a nuestro ecosistema , cuyas características invasivas inciden, sólo por dar un ejemplo, en el mantenimiento de caminos vecinales.
Es un árbol de crecimiento rápido que puede llegar hasta 20 metros de altura en menos de 40 años, con gran capacidad de rebrote por las raíces y resistente a la poda y a la sequía.
En nuestro distrito, específicamente, proponen un problema que demanda laboriosa solución: durísimas tareas de desmonte, que se dificultan aún cuando se efectúan con maquinaria adecuada. Los montes de acacio negro pueden clausurar -y de hecho lo hacen- todo camino rural o traza vecinal que no tenga mantenimiento permanente.
Su eliminación obliga a las áreas operativas del municipio, en este caso la secretaría de Obras y Servicios Viales, Secretaria de Producción a dispersar esfuerzos y recursos. Pero el esfuerzo es absolutamente necesario.
En verdad, han sido pocas las intervenciones que el área ha debido realizar en distintos caminos vecinales del distrito, para solucionar la situación. Por lo menos, temporalmente, porque, como hemos visto, el acacio negro tiende a rebrotar con incontrolable fuerza. Ej. Bajada de 12
DE OCTUBRE, DUDIGNAC, ETC. EL «ANILLO DE LA MUERTE» Y EL DESMONTE
Tras un sin número de pruebas con resultados negativos –como hachar el árbol, que crece nuevamente, y con más fuerza- fue hallada la posible solución al problema que plantea la proliferación del acacio negro, al implementarse el llamado «anillo de la muerte», término acuñado por algún profesional agronómico con sentido del humor un tanto escabroso, para describir el corte de algunos centímetros de profundidad que se practica a lo largo de la circunferencia del tronco del acacio. De este modo se cortan los vasos comunicantes de savia elaborada que irrigan las raíces, matando por «secado» al árbol, a la vez que se siembran especies autóctonas a sus pies, que así pueden desarrollarse.
Si no se va eliminando de manera sistemática cada acacio negro que aparece, en poco tiempo vuelve a conformarse un cerrado monte que impide todo tránsito.
Es que el acacio negro, como todo organismo vivo que invade un ecosistema extraño, es difícil de eliminar, y genera problemas que exigen soluciones puntuales y específicas.
Esperando que el Municipio y/o secretaria de producción actúen de inmediato, tal como han registrado en folletos que han controlado en el primer semestre de 2014 por métodos químicos y mecánicos 55 ha.