Así lo dispuso en su fallo el Tribunal Oral Federal número 2 por considerarlos penalmente responsables en el choque del tren que causó la muerte a 51 personas el 22 de febrero de 2012. El maquinista, Marcos Córdoba, también recibió una pena de tres años y seis meses.
Las mayores penas las recibieron el ex concesionario de Trenes de Buenos Aires (TBA), Sergio Claudio Cirigliano, y el ex secretario de Transporte de la Nación al momento del hecho, Juan Pablo Schiavi, a quienes el Tribunal Oral Federal 2 (TOF2) de la Ciudad de Buenos Aires aplicó condenas de nueve y ocho años de prisión, respectivamente.
Ambos fueron encontrados responsables penales de los delitos de administración fraudulenta en perjuicio del Estado nacional y estrago culposo, por el pago de subsidios estatales y la simultánea falta de mantenimiento de los trenes del ferrocarril Sarmiento.
Si bien los fundamentos de las condenas serán dados recién dentro de tres meses, el tribunal dio por probado que existió una relación causa efecto entre ambos hechos, los que desembocó en la fatal colisión contra el andén 2 de la terminal de la línea Sarmiento.
También fue condenado a seis años de prisión el anterior secretario del área, Ricardo Jaime, a quien el tribunal aplicó una pena unificada con dos condenas anteriores pero sólo lo consideró responsable por el mal uso de los subsidio que pagaba el Estado a la prestataria y no por el estrago culposo.
Las condenas a los principales funcionarios y ex empresarios de la concesionaria sorprendieron por la escala penal alta, ya que aún cuando sean ajustadas en las apelaciones, seguramente los llevarán al cumplimiento efectivo de las penas.
El maquinista Marco Córdoba, para quien dos de las querellas habían pedido la absolución, recibió una condena de tres años y seis meses, con siete de inhabilitación para conducir, ya que se dio por probado que no frenó a tiempo para impedir la embestida de la formación contra los paragolpes del andén. Los familiares de las víctimas que colmaron la sala de audiencias y la puerta de los tribunales de Comodoro Py 2002, donde se inslató una gran pantalla, recibieron el fallo con satisfacción. Desde allí María Luján Rey y Paolo Menghini, los padres de Lucas Menghini Rey, un joven de 20 años que murió en el choque, dijeron estar «conformes» con la sentencia dictada por el Tribunal Oral 2 de Comodoro Py y consideraron que se trató de «un fallo histórico».
«Es lo que esperábamos, el poder político que cubrió a los responsables y que hasta el último día justificó cada palabra que decían y hoy los mira desde Santa Cruz hoy tiene una respuesta de la Justicia», dijo Paolo tras escuchar la sentencia frente a los tribunales.
«Hoy la Justicia condenó a los corruptos que mataron a 52 inocentes y eso es una gran lección. El amor que les dimos en vida se los dimos también en esta lucha y hoy tuvimos una respuesta, pero se inicia otro camino hasta que las sentencias queden firmes», señaló.
Si bien la condenas aplicadas fueron levemente inferiores a las pedidas por los fiscales, y sensiblemente a las que demandaban dos de las cuatro querellas, el fallo se dio en un tiempo razonable.
El juicio se inició hace 21 meses y a apenas dos años después del choque, lo que marca una gran celeridad frente a las demoras de más de una década que suelen insumir la causas penales en el fuero federal, adjudicable a la presión social por encontrar responsables.
El tribunal, integrado por los jueces Jorge Alberto Tassara, Jorge Luciano Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu, y Ana D’Alessio, prohibió la salida del país de los condenados pese a que ninguno quedó detenido ya que llegaron en libertad al juicio.