La ex presidenta Cristina de Kirchner arribó la noche del lunes al aeroparque metropolitano procedente de El Calafate, donde fue recibida por una multitud de militantes kirchneristas y dirigentes políticos de ese espacio que la aguardaban desde las primeras horas de la tarde.
Cristina Fernández, que deberá declarar el miércoles ante el juez Claudio Bonadío en la causa dólar a futuro, se abrazó con algunos de los militantes que se encontraban detrás de un vallado, y luego partió a su domicilio de Paraguay y Juncal en un automóvil acompañada por su hijo Máximo Kirchner.
En el aeroparque se encontraban Oscar Parrilli y los diputados Andrés Larroque y Mayra Mendoza, entre otros, y las organizaciones La Cámpora, la Tupac, Unidos y Organizados y Nuevo Encuentro.
La ex presidenta se dirigió a su domicilio sin hacer declaraciones a la prensa, en el marco de una caravana custodiada por efectivos de la Policía Federal.
Tras permanecer durante cuatro meses en su provincia, Santa Cruz, Cristina regresó a la ciudad de Buenos Aires para prestar declaración ante el juez Bonadío.
La ex presidenta había partido de El Calafate en el vuelo de Aerolíneas Argentinas 1893 a las 19.25 y llegó a la capital antes de lo previsto ya que su arribo estaba estipulado a las 22.15 y lo hizo a las 21.50.
