El diputado provincial de Cambiemos cruzó a diversos referentes del kirchnerismo que despotricaron contra la política energética de Cambiemos. Apuntó contra lo que consideró un doble discurso: “Cuando el kirchnerismo se rasga las vestiduras por el tarifazo pareciera que se olvidan de los 12 años en que ellos estuvieron al frente de un gobierno que subsidió erróneamente y sin discreción a sectores que no lo necesitaban y generó un cambalache energético”, disparó.
El diputado provincial de Cambiemos, Jorge Silvestre, salió al cruce de las críticas vertidas por diversos referentes del kirchnerismo en torno a la política energética de Cambiemos.
“Cuando el kirchnerismo se rasga las vestiduras por el tarifazo pareciera que se olvidan de los 12 años en que ellos estuvieron al frente de un gobierno que subsidió erróneamente y sin discreción a sectores que no lo necesitaban y generó un cambalache energético”, apuntó el legislador.
En ese sentido, Silvestre consideró que “es muy fácil criticar el sinceramiento tarifario sin hacerse cargo del desastre energético que dejaron”.
Además, criticó lo que consideró un doble discurso que “tiene tintes de demagogia” ya que “el modus operandi radica en primero generar el caos energético para luego responsabilizar al gobierno que lo precede por promover el consumo razonable y animarse a emprender el camino de acortar las brechas que tarifariamente hablando existe en distintas regiones del país”.
“Resulta irrisorio pretender vivir en un país donde no exista el consumo responsable de nuestra energía. Es algo que el subsidio constante, sin distinción de sectores, le hizo creer a los argentinos, pero esto no funciona así”, agregó.
Dentro de este contexto fue especialmente crítico con la política subsidiaria: “Es muy fácil caerle al gobierno por actualizar el valor de las tarifas, lo que no se dice es que era insostenible el modelo K en esta materia, que llevó a destinar más de 150 mil dólares en subsidios sin diferenciar sectores sociales. No hay que olvidarse que un hogar humilde pagaba lo mismo que un departamento que consumía dos, tres, cuatro veces más», explicó.