Recientes noticias provenientes de Patricios que llegaron a nuestra redacción, dan cuenta del lamentado fallecimiento del ex convecino de esa localidad, Antonio Servera, acaecido hace unos días en la ciudad de Neuquén, en donde estaba radicado desde hace muchas décadas. Había nacido en 1915 en Patricios. Hijo de ferroviario, aunque a los 15 años comenzó a aprender el oficio de sastre, siguió la carrera de su padre y a los 21 años ingresó a la ex Compañía General de Ferrocarriles de la Provincia de Buenos Aires ( Luego Gral Belgrano), realizó el escalafón hasta llegar a conductor de máquinas locomotoras, primero a vapor, después a diesel y coches a motor, Más tarde, se trasladó a Buenos Aires y se desempeñó como maquinista en el ex Ferrocarril Midland, en trenes de larga distancia y locales. Al lograr sus beneficios jubilatorios fijó con su familia la residencia en Neuquén. Antonio Servera nunca olvidó su club del alma el Club A. Patricios, integró el equipo de primera división, jugando en el medio campo, que en aquella época se denominaba “ Centrohalf “, reemplazó a Pedro Sirio, “ Cabecita de oro “, excelente jugador que había jugado en Talleres. En 1947, obtuvieron el primer campeonato en primera división en el torneo oficial de la Liga Nuevejuliense de Fútbol. Al equipo, lo formaron: Angel Rozas, Poli y Pérez; Campanella, Antonio Servera y Potel; González, Romero, Mateo Servera, Wiscafré y Pino.
También integraron el equipo Radiciotti, García Vera, Gorostein, entre otros. Hace algunas años Antonio Servera regresó a Patricios a reencontrarse con sus amigos, rescató el afecto cosechado en sus 50 años de vida en ese medio, recordando las épocas de la tarea ferroviaria y el fútbol. Sus restos fueron inhumados en Neuquén.