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sábado, noviembre 23, 2024

Nota de opinión

gallollorente-eduardo
Paro salvaje y político
Los empleados que están entre los mejores pagos del país hacen huelga y perjudican tanto a los pasajeros como a la empresa Aerolíneas Argentinas
En la medida que nos vayamos acercando a las elecciones del 2019, se verán muchos paros de sectores alineados con la oposición para horadar el prestigio y apoyo de la ciudadanía que le queda al gobierno.
Hace unos días, un paro sorpresivo y salvaje dejó sin poder volar a más de 40.000 pasajeros de Aerolíneas Argentinas en todo el país, argentinos y extranjeros. En forma intempestiva, para hacer más daño, los gremios aeronáuticos decidieron un paro bajo forma de asamblea para que desde la Secretaría de Trabajo no se llamara a conciliación obligatoria. Hay que remarcar que en todos los países serios, los empleados de líneas aéreas no realizan paros sorpresivos sino que los anuncian con 10 o 15 días de antelación para tratar de no perjudicar tanto a los pasajeros. Los paros deberían hacerse para mejorar las condiciones laborales y los salarios, pero no para perjudicar en demasía al otro. Los trabajadores de Aerolíneas Argentinas, además de estar entre los mejores pagos del país, tienen condiciones de trabajo especiales y mejores que las de los trabajadores de todas las otras aerolíneas, como por ejemplo, dos días de asueto por su cumpleaños, 3 días de descanso con viáticos altos, hospedaje en hoteles de 5 estrellas para la tripulación completa de los vuelos a Europa, generosos viajes para familiares a bajo costo, etc. Muchas de estas no son condiciones habituales en otras líneas aéreas. Alitalia, por ejemplo, les da un día de descanso a la tripulación; y American Airlines, en sus viajes a América del Sur, les otorga 12 horas de descanso ya que los pilotos y toda la tripulación que llega a Ezeiza entre las 6 y 7 de la mañana, a la noche están volando de regreso a Estados Unidos. Los pilotos de Aerolíneas Argentinas, vuelan aproximadamente 40 horas mensuales, cuando en otras compañías ese número asciende a 70. Sería muy extenso seguir detallando otros beneficios con los que cuentan empleados y pilotos de la aerolínea estatal.
En este momento, las autoridades de la empresa aérea quieren renegociar estas condiciones especiales que los empleados fueron consiguiendo durante el gobierno anterior. No es fácil retrotraer a condiciones habituales de otras empresas aéreas cuando ya se les ha otorgado un beneficio a los trabajadores, por eso, creo que las autoridades políticas actuales y futuras no deberían ser tan generosas con el dinero de todos a la hora de asignar beneficios y ventajas que no son las mismas con las que cuentan otros trabajadores que realizan tareas similares. En estos paros, también se mezclan cuestiones políticas y electorales. La conducción del gremio de pilotos, en manos de Pablo Biro, de reconocida militancia kirchnerista, similar a Baradel y a otros, trata de contribuir al caos y al desorden, tal como los diputados y senadores que siguen a la señora Cristina, que se manifestaron en los alrededores del Congreso de la Nación cuando se trataba en Diputados el presupuesto de la Nación.
Hay muchos sectores sindicalizados que tienen ventajas abusivas en nuestro país teniendo en cuenta que somos un país con 30% de pobres y más del 10% de desocupados. Como no soy político ni tengo que seducir a posibles electores y no tengo miedo a posibles represalias futuras digo lo que pienso aunque a algunos que son beneficiarios de éstos u otros privilegios no les guste. Por ejemplo los empleados del Banco Provincia que se jubilaban hasta hace poco a menor edad que el resto de los trabajadores o los docentes que no están bien pagos pero que tienen también muchos beneficios desmedidos como muchos días para faltar por familiar enfermo, por maternidad tienen más días que el resto de las trabajadoras, etc. Todo esto lleva a muchos abusos que pagamos todos, pero en el momento no lo vemos y creemos que tenemos derechos y que no son privilegios, además los paga el Estado que es un ente abstracto.
Hay un ex Presidente Uruguayo, Pepe Mujica, que decía una frase a la que le asistía toda la razón, afirmaba que “los argentinos se quieren poco entre ellos”. Cuando uno observa el accionar de estos sindicalistas y muchos dirigentes sociales y pique- teros no puede dejar de dársele razón.

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