Un juego que se sigue desarrollando en las localidades
Las carreras de sortijas son uno de los juegos o deportes tradicionales de la provincia de Buenos Aires. En 9 de Julio, en el siglo XIX, cuando se echaban las bases fundacionales de la ciudad, se practicada principalmente en las fechas patrias y días festivos, en la calle Libertad, frente a la casa Municipal o en la avenida Montevideo (hoy Mitre), frente a la Plaza.
Las corridas de sortija, como llevando al campo de la mano, se adentra- ban al pueblo. Tal como lo afirma José Wilde, estas destrezas gauchas admiraban a los pue- bleros, quizás también porque “las distracciones eran tan escasas que a veces concurrían las familias a presenciar alguna corrida de sortija…”.
Actualmente, en la localidad de Dennehy se vienen desarrollando con buen éxito las carreras de sortija dominicales. El pasado domingo, las hubo con buena participación de jinetes, con la coordinación de Agustín Capriroli y el grupo «Los Chúcaros de Dennehy».
Este juego se realiza en una calle adecuada, donde se colocan dos postes de aproximadamente 3 metros de altura. Entre uno y otro se ubica un travesaño del que se suspende en el centro atada flojamente, una sortija (del tamaño de las sortijas para los dedos).
El jinete emprende la carrera desde unos 100 metros, parándose sobre los estribos a mitad de recorrido, y a todo galope debe ensartar en la sortija un palito del grosor de un lápiz común que lleva en la mano con el brazo en alto, arrancándola de su fijación. Si lo logra recibe un premio y el reconocimiento de los espectadores con vivas y aplausos.
Cabe recordar que los juegos de sortija se jugaban ya en el siglo XVIII, a tenor del relato que hace de los mismos Eduardo Aunós (“Buenos Aires. Ayer, hoy y mañana”, Madrid, 1943, pág. 119).
